MANEJO DE DESECHOS INDUSTRIALES

A pesar de que se han implementado estrategias, tecnologías y procesos para reducir la generación de desechos, esta sigue siendo una consecuencia prácticamente inevitable de la producción industrial. Por ello es fundamental realizar un manejo adecuado de los desechos industriales para la protección del medio ambiente, la fauna y la salud pública.

Dicho impacto ecológico se puede reducir mediante la correcta gestión de residuos. Es decir, la reducción en la fuente, la reutilización, el reciclaje, el tratamiento y la disposición final adecuada. La reutilización de los residuos industriales implica la utilización de los mismos para otros fines en lugar de desecharlos. Por ejemplo, algunos residuos industriales pueden ser reutilizados como materia prima en otras industrias, o como fertilizantes para la agricultura.

El reciclaje es otro aspecto importante del manejo de residuos industriales. Muchos materiales pueden ser reciclados, como el papel, el plástico, el vidrio, entre otros. Al reciclar estos materiales, se reduce la cantidad de residuos que se envían a los vertederos y se conservan los recursos naturales.

El tratamiento de los desperdicios industriales implica el uso de técnicas especiales para tratar los residuos tóxicos y peligrosos antes de su disposición final. Estos tratamientos pueden incluir la incineración, la neutralización química, la oxidación y la biodegradación.

La disposición final adecuada es también una parte crítica del manejo de residuos industriales. Los residuos industriales que no pueden ser reutilizados, reciclados o tratados deben ser depositados en vertederos diseñados específicamente para este propósito, en donde se garantice que no se producirán contaminaciones al medio ambiente.

Lo anterior también aplica con los metales. Deben ser igualmente tratados, tanto por responsabilidad medioambiental como por aprovechamiento económico.

En lo que a nosotros respecta: ¿No sabes qué hacer con tus desperdicios, maquinaria, refacciones, excedentes de inventario, etc.? Nos encargamos de la logística respecto a la recolección, traslado y manejo de desperdicios industriales no peligrosos, hasta la entrega final del material para su reciclado, reutilización y aprovechamiento, los cuales podrán incluir materiales como metales ferrosos (acero, acero inoxidable, hierro) y no ferrosos (aluminio, cobre, bronce, latón, etc). Al igual que los insumos necesarios para su funcionamiento, como el aceite utilizado en la industria, de manera responsable y sustentable.

Hay dos vías para el tratamiento de dichos metales, la recuperación y reutilización o la eliminación.

La recuperación de los metales es un camino imprescindible para la conservación del medio ambiente que nos permite convertir los residuos en recursos. Tal es el caso del acero, un metal que puede ser reciclado prácticamente en su totalidad e indefinidamente. La recuperación implica un sistema de recogida y captación de los residuos, tanto en el propio origen (la propia industria puede disponer de zonas de acumulación) como en los derivados por gestores.

El proceso de reutilización implica el tratamiento para clasificar, eliminar impurezas, fragmentar y su reintroducción en el ciclo industrial tras su fundición.

Por último la eliminación (en caso de no poder ser reciclados). Para ello hay distintas alternativas, donde lo importante es que su acumulación en vertederos por lo menos respete las garantías medioambientales, evitando la contaminación del entorno y de los acuíferos. He ahí lo imprescindible de contar un buen plan municipal de gestión de residuos.

Tenemos cobertura en casi todo el territorio nacional por medio de personal calificado, procesos controlados con seguridad y mejora continua, cumpliendo las expectativas de las partes involucradas. Facilitamos todo el proceso al tratar con una sola empresa. Solucionamos la administración y comercialización de desperdicios industriales.

  • Conocer las necesidades del cliente.
  • Planear la logística y crear una propuesta de servicio.
  • Coordinar la recolección con el transporte adecuado, el personal capacitado y normatividad ambiental.
  • Determinar el destino final: Reutilización, fundición, eliminación, reciclamiento, etc.